lunes, septiembre 12, 2005
La estrategia razonable en telecomunicaciones
(Comentario a una columna de Guillermo Santos Calderón)
Efraín Barbosa
E-mail: efraim_barbosa@hotmail.com
Ciudad: Bogotá, 12/09/2005 07:35 AM
Apreciado Sr. Santos, no somos locos sino bobos. Por decenios Telecom, ETB y EPM han funcionado sin socios estratégicos. Somos bobos por no tener nuestros propios centros de desarrollo tecnológico e investigación científica. La locura paranoica es la de Uribe Vélez y sus amigos, especialmente el actual presidente de Telecom, cuando solo tienen interés en entregar nuestros recursos a los millonarios extranjeros; por supuesto, debemos suponer que es a cambio de algo para sus bolsillos privados. Locos son Uribe y sus asociados que lanzaron a la calle a los ingenieros y científicos de Telecom que estaban en capacidad de desarrollar una tecnología propia. Somos bobos al creernos inferiores a otros pueblos que son capaces de tener sus propias tecnologías y sus propios Estados nacionales. Es una bobada gigantesca hacer contratos a dedo con los más millonarios del mundo de quienes nadie duda que sus negocios han sido obscuros, leoninos y corruptos. Copia a los senadores Robledo y Gaviria.
Efraín Barbosa
E-mail: efraim_barbosa@hotmail.com
Ciudad: Bogotá, 12/09/2005 07:35 AM
Apreciado Sr. Santos, no somos locos sino bobos. Por decenios Telecom, ETB y EPM han funcionado sin socios estratégicos. Somos bobos por no tener nuestros propios centros de desarrollo tecnológico e investigación científica. La locura paranoica es la de Uribe Vélez y sus amigos, especialmente el actual presidente de Telecom, cuando solo tienen interés en entregar nuestros recursos a los millonarios extranjeros; por supuesto, debemos suponer que es a cambio de algo para sus bolsillos privados. Locos son Uribe y sus asociados que lanzaron a la calle a los ingenieros y científicos de Telecom que estaban en capacidad de desarrollar una tecnología propia. Somos bobos al creernos inferiores a otros pueblos que son capaces de tener sus propias tecnologías y sus propios Estados nacionales. Es una bobada gigantesca hacer contratos a dedo con los más millonarios del mundo de quienes nadie duda que sus negocios han sido obscuros, leoninos y corruptos. Copia a los senadores Robledo y Gaviria.